Somos una familia de hermanos en la fe católica, pertenecientes a
distintas parroquias, que hemos sentido el llamado de Dios para orar por la
vida desde la gestación, ya que la vida es un don y como don hay que cuidarla y
entregarla en flor a la generación futura.
Reconocemos a nuestro Padre Celestial como papá de esta familia, a Jesús
Nuestro Señor como hermano mayor, a la Virgen de Guadalupe como nuestra
Madre celestial, a San José como padre custodio y al Espíritu Santo como nuestro
Director. Confiamos en la intercesión de la comunión de todos los santos y
santas, especialmente de Santa Teresita de Jesús, beatos y venerables fundadores de las comunidades
religiosas.
Ayudamos a que todos nuestros hermanos conozcan y se alegren que desde
el vientre materno Dios nos ha elegido a una misión y vocación específica, y
por nuestro bautismo somos llamados a la santidad.